La Importancia del Auto-Diagnóstico

AUTISMO EN MUJERESTDAH EN MUJERES

Patricia Ortega

black blue and yellow textile

¿Es el diagnóstico en la edad adulta un artículo de lujo?

Si estás leyendo este blog posiblemente ya sabrás la respuesta. Sí, es un artículo de lujo poder tener un diagnóstico ya sea de autismo o de TDAH si eres mujer y adulta.

Te habrás pasado media vida yendo de médico en médico consultando tus síntomas solo para recibir contestaciones tales como: "tus analíticas están todas bien", "lo que tienes es ansiedad y depresión", etc.

"Tienes astenia primaveral, toma unas vitaminas", me decían a mí cuando conseguía llegar arrastrándome hasta la consulta de mi médico con un burnout que no podía ni caminar.

"¿Te gusta tu trabajo? ¡Lo que te pasa es que eres vaga y no quieres ir a trabajar!", fue una de las respuestas que me regaló un psiquiatra que me estaba tratando.

Si juntaramos todas las respuestas que nos han dado los médicos a las mujeres que hemos ido en busca de un diagnóstico, tendríamos para escribir un libro. Pero mejor cambiemos de tema.

No quiero culpar a los médicos pues no es su culpa. Ellos en su bien hacer y con el tiempo del que disponen hacen lo que pueden para entenderte y ayudarte, pero claro; si partimos de la premisa de que los criterios diagnósticos están totalmente sesgados al centrarse tan solo en niños y varones...¡Apaga y vámonos!

Vivimos en un mundo de hombres donde en cosas tan básicas como los estudios para el diagnóstico de trastornos, utilizaban sólo hombres. ¿Y por qué? Pues aparte de por la respuesta que sabemos todas; porque al hacer los estudios sólo de un género, resultaba más barato.

Pero con estos criterios diagnósticos también se quedaron muchos hombres, que no entraban en lo que antes se consideraban rasgos autistas, por ejemplo; sin diagnóstico. Pero sí que tenían etiquetas de torpe, burro, vago, etc; al igual que nosotras.

Hasta no hace mucho, la idea de un niño autista era un niño no verbal, con cierto retraso cognitivo y con muchas estereotipias. Y también que eras más o menos autista. Hoy en día sabemos que "no eres más o menos autista", o "tienes rasgos autistas"; si no que el autismo es un espectro y eso significa que algunas áreas las puedes tener más afectadas que otras.

Para el TDAH, la idea sigue siendo el niño que no para en clase, que habla sin parar y que se porta mal. Se contempla tan solo la impulsividad y la hiperactividad física, la que se ve más en los hombres. La hiperactividad mental, que es más típica de las mujeres; no se tiene tanto en cuenta simplemente porque es más difícil de ver.

Ahora las cosas han mejorado un poco a la hora de diagnosticar pues ya se sabe que las niñas y las mujeres también podemos ser autistas o tener TDAH, pero que nuestro autismo y TDAH es distinto al que se presenta en los varones. ¡Bien, es un paso!

Ahora el reto reside en encontrar profesionales que te diagnostiquen siendo ya adulta, pues algunos piensan que si "hemos sobrevivido" (atención a la elección de palabras) sin el diagnóstico hasta ahora, ya no lo necesitamos.

Muchos especialistas no saben diagnosticar a mujeres adultas; pues si ya no todos los psiquiatras o neurólogos, por ejemplo; están cualificados para diagnosticar el autismo o el TDAH, el número es aún más pequeño cuando se trata de diagnosticar a adultos.

La medicina pública no nos diagnostica y la privada es cara; por lo que muchas mujeres tienen que quedarse simplemente con el auto-diagnóstico.

Una cosa está clara: una persona neurotípica no se pasa su vida cuestionando qué es lo que le pasa y preguntándose si será autismo. No nos dan una medalla por ser autistas o tener TDAH.

Lo que sí obtenemos es claridad sobre nuestras experiencias de vida y paz, mucha paz; porque al fin logras entender el porqué de las cosas que te han pasado, por qué tienes ciertas necesidades y comportamientos, etc.

El comprendernos a nosotras mismas y ver que lo que tenemos es autismo o TDAH, es el principio de un gran viaje de auto-descubrimiento y sobretodo de sanación y amor propio. Al conocernos a nosotras mismas, creamos la oportunidad de vivir una vida más plena y auténtica, ser quien realmente somos, sin máscaras; de descubrir quién somos en realidad y de aceptarnos.

Ya que estamos terminando, te invito a reflexionar sobre tu propio camino:

  • ¿Qué aspectos de tu vida te han llevado a considerar el auto-diagnóstico?

  • ¿Qué cambios has notado desde que empezaste a explorar esta posibilidad?

  • ¿Llevas algún método o estrategia para comprender tus comportamientos autistas o de TDAH?

  • Una vez que ya has comprendido que lo que te pasa tiene nombre; ¿cómo te sientes?, ¿son emociones positivas o negativas?

  • ¿Haces algo para sentirte mejor?

Si quieres compartir las respuestas a estas preguntas conmigo, no dudes en hacerlo. Aquí estamos todas en el mismo camino para ayudarnos las unas a las otras.

Si te sientes identificada con estas experiencias y deseas profundizar en tu autoconocimiento, te invito a unirte a nuestro grupo de Facebook en donde encontrarás a más mujeres con tus mismas características. Se trata de un grupo privado donde compartimos experiencias, dudas, nos servimos de guía las unas a las otras y sobretodo, nos apoyamos y no nos sentimos solas.

Pincha en el nombre para entrar: Mujeres con diagnóstico tardío o auto-diagnóstico de autistmo y/o TDAH.